1. Planea tus comidas en casa:

Cocina en casa y además de que reducirás de manera significativa tus gastos, dejarás de aportar grandes cantidades de plásticos y empaques a nuestro ecosistema.

2. Utiliza recipientes para rellenar:

Aplica desde el termo de café y botella de agua, hasta los recipientes para comprar a granel artículos de limpieza y alimentos. Al igual que en el punto anterior, evitas los desechos de botellas y empaques de plástico que contaminan nuestro planeta.

3. Usa bombillas de bajo consumo:

Además de que duran más tiempo, puedes obtener un ahorro de hasta 80% de energía eléctrica lo que se verá reflejado en tu recibo de luz.

4. Desconecta los aparatos eléctricos que no utilizas:

El gasto de energía en espera o standby representa el 5% del consumo de electricidad en el hogar. Ahorra en un recibo de luz y aporta al cuidado del medio ambiente.

5. Disminuye el consumo de combustible:

Comparte tu automóvil con compañeros del trabajo que vivan cerca o estén por la ruta, intenta utilizar el transporte público, camina y muévete en bicicleta a donde te sea posible.

Las acciones pequeñas también generan cambios.

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